Puedo verla desde el sillón
mientras disfruto, relajado, de una copa de licor. En mis muslos reposa la fusta
que acaba de romper el silencio rasgando el aire y restallando en sus nalgas.
En mi mente gozo del recuerdo cercano del sonido del cuero y de los gemidos después
de cada azote
Sé que está empapada, sé que
espera ansiosa que nuevamente tome posesión de su cuerpo, que la use para mi
placer, como tiene que ser. Y sé también el placer que esa sensación de entrega
y de sentirse mía le produce.
Disfruto de los azotes dados, de
ver su piel marcada y llena de color y disfruto aún más de hacerla esperar,
mientras me deleito en las posibilidades.
Hermosa imagen y muy sentida.
ResponderEliminarFeliz fin de semana :D
Un cálido beso y un eterno abrazo con el mayor de mis respetos hacia Usted Sr Manuel Salcedo